Qué sucede cuando el termostato de tu coche no funciona Guía y soluciones
Los componentes de un vehículo están diseñados para operar eficientemente a una temperatura determinada. La responsabilidad de controlarla recae en el termostato, una parte mecánica esencial en el sistema de enfriamiento.
Explorando la Lectura a Altas Temperaturas
¿Cómo saber si el termostato de tu auto está funcionando correctamente? Al encender tu auto, uno de los principales indicadores a tener en cuenta es la temperatura. Si notas que la lectura del indicador está constantemente alta o, por el contrario, constantemente baja, es probable que el termostato esté fallando.Este problema suele manifestarse entre 15 y 30 minutos después de haber iniciado el vehículo, aunque en algunos casos puede ocurrir incluso antes de notar síntomas de sobrecalentamiento. Es importante tener en cuenta que algunos modelos más económicos no tienen un indicador de temperatura, por lo que es importante prestar atención a otros posibles signos de mal funcionamiento.
Siempre es recomendable realizar revisiones regulares del termostato y del sistema de refrigeración de tu auto, para asegurarte de que todo esté funcionando correctamente y evitar daños mayores en el motor. Ante cualquier duda o anomalía, no dudes en consultar con un mecánico especializado para que pueda realizar las reparaciones necesarias. Recuerda que la seguridad de tu vehículo y tu bienestar en la carretera dependen de un correcto funcionamiento del termostato.
Señales que indican un mal funcionamiento en nuestro termostato
Una posible incidencia frecuente en los termostatos es su apertura o cierre parcial o completo.
El termostato se puede atascar en posición «abierta», lo que provoca un problema frecuente en este dispositivo. Pero, ¿qué significa esto exactamente? Básicamente, que el líquido refrigerante fluye por todo el sistema sin detenerse en el bloque del motor, lo que hace que la temperatura indicada en el panel de instrumentos sea muy baja, alrededor de 60ºC. Esta situación tiene consecuencias negativas, ya que la calefacción no funcionará correctamente y notaremos un consumo excesivo de combustible. Esto se debe a que los sensores de temperatura informarán a la unidad de control que el motor está frío, lo que ocasionará un aumento en la cantidad de combustible inyectado.
Por otro lado, también existe la posibilidad de que el termostato quede atascado en posición «cerrada», lo que resulta en un aumento excesivo de la temperatura. En esta situación, el líquido refrigerante del motor comenzará a calentarse sin posibilidad de enfriarse al no poder circular hacia el radiador del motor. Como resultado, la temperatura del motor se elevará por encima de los 90ºC, que es la temperatura óptima de funcionamiento.
Regulador térmico pieza esencial en el funcionamiento del sistema de enfriamiento de todo automóvil
Su sistema de refrigeración es fundamental para garantizar el correcto funcionamiento del motor. Y en ese proceso, el termostato es un elemento clave. Este dispositivo de control de temperatura tiene un rol fundamental: prevenir el sobrecalentamiento del motor.
El termostato realiza esta tarea gracias a su capacidad para monitorear constantemente la temperatura y regular el flujo preciso de refrigerante que debe circular por el radiador. De esta forma, asegura que el motor alcance su temperatura óptima de trabajo y la mantenga constante. Además, su correcto funcionamiento reduce el desgaste del motor, así como la formación de depósitos y las emisiones.
El mecanismo del termostato es sencillo pero eficiente. Está compuesto por un plato de resorte y una serie de placas que se abren o cierran dependiendo de la temperatura y las necesidades del motor en cada momento. Gracias a este sistema, el termostato puede regular de manera precisa el flujo de refrigerante y mantener el motor en perfecto estado.
Su función es determinante para evitar el sobrecalentamiento, mantener una temperatura constante y reducir el desgaste y las emisiones. Por ello, es importante revisar periódicamente su estado y garantizar su correcto funcionamiento para asegurarnos un óptimo rendimiento del motor.
La importancia de realizar un mantenimiento al termostato para prevenir fallos
Mantener el termostato en buen estado es vital para evitar problemas en el sistema de refrigeración y el funcionamiento del motor. Para lograrlo, es crucial llevar a cabo revisiones periódicas y un mantenimiento preventivo adecuado. De esta forma, aseguramos que el termostato de nuestro vehículo no presente averías y funcione de manera óptima.
Entre las medidas a tener en cuenta para evitar fallos en el termostato, es importante cambiar el refrigerante regularmente y con cuidado, ya que si entra aire en el sistema, puede causar sobrecalentamiento o sensores defectuosos.
Además, es recomendable realizar una inspección visual del termostato, junto con otros elementos como la bomba de agua y la correa de distribución. La empresa Dolz sugiere hacerlo en conjunto, lo que garantiza que las válvulas se coloquen correctamente y se eviten posibles problemas. Reemplazar estos elementos al mismo tiempo también asegura evitar reparaciones innecesarias.
Cómo trabaja el termostato
Cuando se inicia el encendido del vehículo, es común que el termostato permanezca cerrado, bloqueando el paso del líquido refrigerante hacia el motor. No es hasta que el tiempo transcurre y el motor se calienta, que a partir de los 80ºC el termostato empieza a abrirse, permitiendo un flujo controlado de anticongelante. Y cuando alcanza los 87ºC, el termostato se abre completamente según su configuración. Esto es fundamental para asegurar que el sistema de enfriamiento del coche funcione adecuadamente y sin sobrecalentamiento.
Cabe mencionar que, en caso de que el motor produzca menos calor, el termostato volverá a cerrarse para elevar nuevamente la temperatura. En consecuencia, este componente se encarga constantemente de abrir y cerrar su muelle para un control continuo. En el caso de los motores diésel, el termostato suele operar alrededor de los 85ºC, mientras que en los motores de gasolina la temperatura se acerca más a los 90ºC. Con este mecanismo de termostato, se garantiza un rendimiento óptimo del sistema de refrigeración del vehículo.
Hay varios reguladores de temperatura en el vehículo
Coches con termostatos adicionales
Si bien la mayoría de los automóviles en circulación están equipados con un único termostato, hay algunos casos en los que se pueden encontrar vehículos con termostatos adicionales. Estos incluyen coches deportivos, que suelen tener un segundo termostato en el circuito del aceite para garantizar un rendimiento óptimo del motor. Además, los coches híbridos también cuentan con un termostato adicional, encargado de controlar el circuito de refrigeración dedicado a la batería de alto voltaje. Estos termostatos adicionales son una medida de seguridad y eficiencia para asegurar que el motor y otros componentes del vehículo funcionen de manera adecuada y no sufran daños por sobrecalentamiento. Por lo tanto, es importante tener en cuenta la presencia de estos termostatos adicionales en ciertos tipos de vehículos al realizar el mantenimiento y reparación de los mismos.
Razones por las que un termostato puede dejar de funcionar
¿Tu vehículo tiene problemas con el termostato? ¿Necesitas asistencia para reparar cualquier fallo? En RACE Eurekar tenemos la solución con total confianza. Si necesitas encontrar un taller, ¡estamos aquí para ayudarte!¿Te preocupa el correcto funcionamiento del termostato de tu automóvil? No te preocupes, en nuestros talleres de RACE Eurekar nos encargamos de solucionar cualquier avería con garantía y profesionalidad. ¡No dudes en buscar tu taller ideal!
¿Notas que el termostato de tu coche no está funcionando bien? ¿Buscas una reparación de calidad? RACE Eurekar es tu taller de confianza para resolver cualquier problema con el mejor servicio garantizado. No esperes más, ¡encuentra tu taller perfecto!
