50 días sin beber impacto en la salud del cuerpo

Los trastornos de salud crónicos como el cáncer, la insuficiencia cardíaca y la diabetes están estrechamente relacionados con el consumo frecuente de alcohol. Durante la crisis por COVID-19, se ha notado un aumento alarmante en el consumo de estas bebidas en varios países. Tanto en Estados Unidos como en el Reino Unido, se ha observado que este hábito afecta negativamente a numerosas personas, lo que ha llevado a la implementación de iniciativas para fomentar la reducción o el control del consumo de alcohol.

Mi vida social giraba en torno al alcohol

Cuando terminaba mi jornada laboral, solía salir a tomar alguna bebida alcohólica o comer algo antes de seguir con mis planes de diversión (que en su mayoría incluían más alcohol). Este tiempo de ocio se había vuelto repetitivo y predecible. Sin embargo, dejar de lado este hábito no fue sencillo, ya que significaba redescubrir...

la verdadera noción de tener tiempo libre.

Lo complicado era que nunca quedaba con mis mejores amigos en otro lugar que no fuera un bar. Siempre terminábamos en un lugar desolado donde solo se servía cerveza barata. Nunca nos poníamos al día tomando un café o quedando para comer, a menos que fuera alguna comida rápida en el mismo bar...

Pero al final, tuve que aceptar la situación.

Decidí cambiar mi rutina y comencé a quedar con mis amigos para ir a eventos deportivos o conciertos. Y todo empezó a ser diferente una vez que dejé de beber. De repente, ya no tenía recuerdos borrosos y empecé a disfrutar de todo y recordarlo con claridad. Finalmente, pude...

conocer el verdadero significado de divertirse.

Más concentración

Al mejorar el descanso y la hidratación, también se fortalece significativamente la concentración. La ausencia de líquidos, por su parte, puede generar molestias como cefaleas, alteraciones en la actividad nerviosa y muscular, y provocar cansancio o malestar estomacal. Por ello, es fundamental aumentar la energía.

Al asegurar un descanso adecuado y una correcta ingesta de agua, se puede notar una clara mejoría en la capacidad de concentración. Los dolores de cabeza producidos por la deshidratación y otros síntomas como la fatiga y las náuseas pueden ser perjudiciales para el funcionamiento del organismo.

Es importante destacar que mantenerse bien hidratado y descansar lo suficiente también tiene un impacto positivo en la función nerviosa y muscular. Además, puede prevenir la aparición de molestias y malestares que afecten al rendimiento físico y mental. Una buena hidratación es clave para incrementar la energía.

El impacto del alcohol en el funcionamiento cerebral

El cerebro es uno de los órganos más afectados por el consumo de alcohol, especialmente en los jóvenes cuyo cerebro aún está en desarrollo, según señala el experto Santiago Canals.

La influencia del alcohol en el cerebro se puede dividir en varios capítulos. En primer lugar, se produce una inflamación crónica que afecta al funcionamiento normal del órgano. Además, su toxicidad tiene un impacto bioquímico y neuroquímico que puede ser perjudicial.

Las drogas, incluyendo el alcohol, actúan como "parásitos" en los circuitos neuronales y generan una asociación entre su consumo y las memorias placenteras. Esto puede llevar a un consumo compulsivo y a la pérdida de control consciente a través de la corteza prefrontal, convirtiéndolo en un hábito.

Si bien el daño es evidente, ¿puede revertirse? Según Santiago Canals, sí es posible, pero no de forma inmediata ni completamente efectiva. El factor clave es la cantidad de alcohol consumido. Si es esporádico, el cerebro puede recuperarse después de experimentar el falso placer de la droga. Sin embargo, aquellos que son consumidores habituales enfrentan un mayor desafío.

Más energía

Enfrenta el reto de no beber por un mes y descubre una nueva energía

De acuerdo a estudios realizados por el doctor Visser, abstenerse de alcohol durante treinta días puede tener efectos positivos en tu cuerpo y mente.

Libérate de la resaca y experimenta una mayor fuerza y vitalidad.

Según el estudio, dos tercios de los participantes declararon sentirse más fuertes después de un mes sin beber alcohol.

No solo eso, sino que también notaron mejoras en su capacidad de atención, concentración y calidad del sueño.

¿Te has preguntado por qué los lunes te sientes más lent@ y desanimad@? Incluso si solo bebes los fines de semana, tu cuerpo y mente sufren las consecuencias.

Rompe el ciclo y demuéstrate a ti mism@ de lo que eres capaz. Empieza a vivir con más energía y claridad al dejar de beber por tan solo un mes. ¡Te sorprenderás de los resultados!

Reducción de líquidos en el organismo

El alcohol es un diurético efectivo, lo que conlleva a una rápida deshidratación. Por este motivo, se recomienda alternar su consumo con agua. Al bloquear la acción de la hormona antidiurética, el alcohol provoca una mayor necesidad de orinar, aumentando así la pérdida de líquidos en el organismo. Esto se agrava por los síntomas de la resaca, que pueden incluso afectar negativamente al cerebro debido a la deshidratación.

Sin embargo, este efecto no dura mucho tiempo. Cada persona es diferente, pero adoptar hábitos saludables es clave para revertirlo. Entre ellos, destaca la importancia de beber más agua después de haber consumido alcohol. Como explica la presidenta de la Federación Española de Asociaciones de Ayuda al Drogodependiente (FEAD), la recuperación suele ser rápida una vez que se deja de beber. Incluso se puede observar en la duración de la resaca de una persona.

El consumo responsable de alcohol también implica una adecuada hidratación. No solo se trata de evitar la deshidratación temporal, sino de cuidar nuestra salud en general. Se recomienda beber abundante agua durante y después de beber alcohol, así como mantener buenos hábitos de hidratación en el día a día. No esperes a tener sed, ya que esto suele ser una señal de que nuestro cuerpo ya ha perdido líquidos. Recuerda que nuestro organismo está compuesto principalmente por agua y debemos mantener un equilibrio adecuado para su buen funcionamiento. Al alternar una copa de alcohol con un vaso de agua, no solo estaremos previniendo la deshidratación, sino también promoviendo un consumo responsable y saludable.

Reducción de masa corporal en el futuro cercano

Montserrat Cuadrado

El consumo de alcohol puede tener un impacto negativo en nuestra nutrición y salud. Aunque puede brindar energía, sus calorías no contienen nutrientes importantes para nuestro cuerpo. En comparación, los nutrientes que se encuentran en una manzana nos proporcionan no solo energía, sino también vitaminas y fibra que promueven una buena salud. Por otro lado, el alcohol puede alterar la absorción y metabolismo de vitaminas, lo que puede llevar a deficiencias carenciales.

Incluso una cantidad moderada de alcohol puede aumentar el riesgo de sufrir deficiencias nutricionales. Por esta razón, puede ser necesario complementar nuestra dieta con suplementos de vitaminas si consumimos alcohol con frecuencia.

Además, el alcohol puede estimular nuestro apetito y aumentar nuestras ganas de comer. Si queremos cuidar nuestra alimentación y controlar nuestro peso, puede ser importante limitar o eliminar el consumo de esta sustancia. Sin embargo, los resultados no serán inmediatos y pueden requerir un cambio en nuestra dieta a largo plazo.

Por lo tanto, es importante reducir o evitar su consumo y elegir una alimentación saludable para cuidar de nuestro cuerpo a largo plazo.