Descubre el significado de AGI Inteligencia Artificial General

Mientras la inteligencia artificial se apoya en crecientes conjuntos de información para llevar a cabo labores más sofisticadas, la AGI mostrará las mismas cualidades que están estrechamente vinculadas con el cerebro humano. A continuación, te ofrecemos una mayor explicación al respecto.

Comprendiendo la Complejidad de la Inteligencia Artificial Universal UAI

La Inteligencia Artificial General, conocida también como IA fuerte o IA completa, es un concepto que se refiere a un tipo de IA capaz de comprender, aprender y realizar tareas intelectuales de manera similar al cerebro humano. En otras palabras, se trata de una IA que tiene la capacidad de adquirir conocimiento de la misma forma en que lo hacen los seres humanos.

Este tipo de IA se diferencia de otras formas de inteligencia artificial, ya que no se enfoca en resolver un solo problema específico, sino que busca desarrollar capacidades cognitivas generales. Sin embargo, algunas personas son escépticas a la hora de denominarla como "IA fuerte", ya que consideran que el término implica una sensibilidad y conciencia que no se aplica a lo que realmente es.

Es importante mencionar que la AGI no tiene como objetivo alcanzar la conciencia, sino imitarla a través de programas de computadora diseñados para resolver una tarea en particular. Por lo tanto, no se puede esperar que estos programas experimenten conciencia o sensibilidad, ya que su propósito es meramente funcional.

El impacto actual de la Inteligencia Artificial General en las empresas

En estos tiempos, son muchas las compañías que ya están adentrándose en las posibles aplicaciones de la AGI. Dado que se trata de un campo aún en sus inicios, nadie tiene certeza sobre el alcance que pueden tener dichas aplicaciones.

De acuerdo a una encuesta realizada en 2020 por el Instituto de Riesgos Globales Catastróficos (GCRI), actualmente existen 72 proyectos de Investigación y Desarrollo (I+D) en torno a la AGI, llevados a cabo por instituciones académicas, empresas y diversas entidades gubernamentales. Dicha encuesta sugiere que estos proyectos tienden a ser más pequeños, con menos enfoque en objetivos académicos y más en objetivos humanitarios.

Entre los actores más destacados en el ámbito de la AGI se encuentra la Universidad Carnegie Mellon con su modelo ACT-R, el cual puede describirse como una forma de especificar la organización del cerebro para permitir que los módulos de procesamiento individuales generen cognición.

Contraste entre Inteligencia Artificial y Inteligencia General

La Inteligencia Artificial General (AGI): más avanzada pero diferente a la IA

Como hemos visto, la AGI es un tipo de IA más avanzada y debemos tener en cuenta que no son términos intercambiables. La IA se refiere a una máquina capaz de reproducir habilidades cognitivas humanas, como la resolución de problemas y el aprendizaje. Sin embargo, la clave aquí es que primero un humano debe programarla para que aprenda de patrones pasados y así poder generar nueva información o resolver problemas.

Un ejemplo práctico: un programa de ajedrez

Una IA diseñada para jugar al ajedrez, por ejemplo, requeriría que una persona le proporcionara datos sobre movimientos de ajedrez previos y la máquina los usaría para tomar decisiones basadas en esa información. Pero eso sería todo lo que podría hacer.

Diferencias entre IA y AGI

A diferencia de la IA, que está predefinida para llevar a cabo una tarea que un ser humano podría realizar de manera más eficiente, la Inteligencia Artificial General (AGI) tiene como objetivo alcanzar el mismo nivel de inteligencia que un ser humano. En otras palabras, se busca que la AGI tenga la capacidad de resolver problemas, aprender y tomar decisiones como lo haría una persona.

El camino hacia nuevos descubrimientos e innovaciones aún no termina

Dejando atrás los temores, la gran mayoría de los investigadores coinciden en que es necesario pasar varias décadas, e incluso siglos, para lograr una verdadera inteligencia artificial. Esta, debe cumplir varios criterios (en constante evolución) antes de volverse una realidad. Dichos criterios incluyen la capacidad de razonar, utilizar estrategias, resolver rompecabezas y emitir juicios.

Parece ser que existen tres ideas diferentes al respecto: la mayor parte de los especialistas son escépticos ante la posibilidad de que la AGI (Inteligencia Artificial General) se materialice, mientras que otros sugieren que con el paso del tiempo, el deseo de crear una inteligencia artificial equiparable a la humana se desvanecerá. Por otro lado, hay quienes, como ya se ha mencionado, están impulsando su progreso para beneficio de la humanidad.

No obstante, en la actualidad, los científicos siguen en una etapa de planificación para el desarrollo de la AGI y se espera un progreso mínimo en las próximas décadas.

Explorando el concepto de Inteligencia Artificial General IAG

La inteligencia artificial general (AGI) es un tipo de sistema autónomo que tiene la capacidad de realizar tareas intelectuales de manera exitosa, equiparable a las realizadas por los seres humanos. La AGI va más allá de la simple automatización de tareas, pudiendo realizar juicios y razonar en situaciones de incertidumbre gracias a su capacidad de aprendizaje y entrenamiento. Además, es capaz de comunicarse en lenguaje natural, planificar y aprender, entre otras habilidades.

OpenAI define la inteligencia artificial general como un sistema autónomo que supera la capacidad humana en la realización de tareas con valor económico. Aunque también se utiliza el término "inteligencia artificial fuerte" para referirse a estos sistemas, hay expertos que reservan dicho calificativo para aquellos que incluso tienen consciencia de sí mismos.

La AGI es objeto de gran debate ético debido a su capacidad de tener sentimientos y una experiencia subjetiva propia, algo que ha sido explorado en numerosas obras de ciencia ficción. La posibilidad de que una máquina sea consciente de su existencia y desarrolle emociones abre interrogantes sobre su impacto en la sociedad y en las relaciones humanas.

Divergencias entre la IA limitada o específica

La Inteligencia Artificial (IA) ha avanzado mucho en los últimos años, pero aún no hemos alcanzado la AGI (inteligencia artificial general), también conocida como 'superinteligencia'. En la actualidad, los sistemas de IA que utilizamos se clasifican como IA sin apelativos adicionales, aunque a menudo los llamamos "IA débil" o "IA estrecha" para distinguirla.

Estos sistemas de IA débil se enfocan en resolver problemas específicos gracias al uso de tecnologías como el aprendizaje máquina (machine learning) o el aprendizaje profundo (deep learning). Estas disciplinas permiten que la IA aprenda y mejore su rendimiento en base a los datos y patrones que recibe.

Gracias a estas técnicas, los sistemas de IA han logrado superar a los seres humanos en ciertas tareas específicas. Ejemplos de ello son Deep Blue en el juego de ajedrez y AlphaGo en el juego del Go. Estos son solo dos ejemplos de cómo la IA ha demostrado su capacidad práctica en comparación con los humanos, pero existen muchas otras aplicaciones exitosas.

Retos de índole ética y protección

A pesar de las beneficios de contar con una *Inteligencia Artificial General* (IAG), también existen riesgos y desafíos éticos y existenciales evidentes en la búsqueda de esta meta. Como afirmaron los responsables de OpenAI anteriormente, la creación de una IAG es posiblemente el proyecto más importante de la historia de la humanidad.

En un artículo publicado en el blog oficial de la empresa, se reflexionaba sobre la importancia de desarrollar sistemas que sean más inteligentes que los seres humanos, pero de manera segura. Los responsables de OpenAI reconocen que esto es una tarea compleja y llena de responsabilidad.

En la actualidad, el desarrollo de modelos de inteligencia artificial supone un riesgo real para la humanidad, incluso existencial. Varios expertos en el tema, tanto dentro como fuera del campo de la IA, han advertido sobre este peligro. En abril de 2023, un experto en IA llegó a afirmar que una AGI "nos matará a todos". Ante esta situación, a principios de 2023, un grupo de expertos y personalidades, incluyendo a Elon Musk, *frenaron* su trabajo y firmaron una carta abierta solicitando una pausa en el desarrollo y entrenamiento de modelos de inteligencia artificial para debatir cómo llevar a cabo este trabajo de manera segura.