Explorando la presencia del Uranio en el cuerpo humano efectos usos y curiosidades

Para aquellos interesados en saber más sobre los posibles impactos en la salud del uranio natural y empobrecido, esta guía responde a las interrogantes más comunes. Si desea ampliar su conocimiento, le invitamos a contactar al Centro de Información de ATSDR al 1-800-232-4636. Esta publicación forma parte de una serie que ofrece una visión general sobre sustancias peligrosas y sus consecuencias para la salud. Resulta crucial comprender esta información ya que dicha sustancia puede ser perjudicial. Cabe mencionar que los efectos de la exposición a cualquier agente tóxico varían según la dosis, la duración, la forma de exposición, los hábitos y características personales, así como la presencia de otras sustancias químicas.

El límite de uranio que puede ingerir una persona

El uranio, uno de los elementos químicos radiactivos más presentes en nuestro entorno, se encuentra de forma natural en el suelo, el agua y distintos alimentos. Aunque su ingesta en pequeñas cantidades no supone un peligro para nuestra salud, su consumo en grandes cantidades puede tener efectos negativos en nuestro cuerpo.

Dicha cantidad tolerable de uranio en nuestra dieta dependerá de diversos factores como la edad, el peso, el género y el estado de salud general. Además, la exposición a fuentes adicionales de uranio, como la radiación, también puede influir en la cantidad segura para nuestra ingesta diaria.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la ingesta diaria de uranio considerada segura para los adultos es de aproximadamente 0,06 microgramos por kilogramo de peso corporal. Esto se traduce en que una persona de 70 kg podría consumir hasta 4,2 microgramos de uranio al día sin poner en riesgo su salud.

La radiactividad del uranio una explicación

El uranio es un elemento químico natural que destaca por su radiactividad. Esta característica se debe a su núcleo inestable, el cual emite partículas y energía en forma de radiación.

La inestabilidad del uranio se debe a su núcleo atómico, en particular al isótopo más común, el uranio-238. Este isótopo cuenta con 92 protones y 146 neutrones, lo que provoca una gran inestabilidad en su núcleo. Este fenómeno se explica por la proporción de neutrones y protones, que busca lograr una mayor estabilidad nuclear.

La búsqueda de estabilidad lleva al uranio-238 a descomponerse mediante la desintegración radiactiva. Este proceso consiste en la emisión de partículas alfa, beta y radiación gamma como resultado de la transformación del núcleo de uranio-238 en otros elementos más estables.

Proceso de extracción del uranio

Extracción de uranio en el siglo XX y XXI

Durante el siglo XX, se acostumbraba extraer menas de uranio de minas subterráneas o a cielo abierto. Tras ello, se procedía a su trituración y refinamiento para separarlo de los demás componentes.

Sin embargo, desde el comienzo del siglo XXI, este procedimiento ha ido siendo sustituido gradualmente por la lixiviación in situ. Apenas en el año 2000, solo un 16 % de la extracción de uranio se hacía mediante esta técnica, pero para 2020 esta cifra se ha elevado al 58 %.

Mediante la lixiviación in situ, se introduce una mezcla de agua y otras sustancias en los depósitos subterráneos de uranio. De este modo, se extrae el uranio de la roca y se bombea a la superficie. Este líquido se transforma luego en lo que se conoce como la torta amarilla.

Descubriendo el significado del uranio agotado

El uranio empobrecido posee una cantidad de U 235 por debajo del 0,7%. Este elemento es un derivado del proceso de enriquecimiento de uranio y menos radioactivo que el uranio natural. Es considerado residuo radiactivo de baja actividad o utilizado en la producción de combustible MOX.

El uranio empobrecido contiene menos del 0,7% de U 235, siendo un subproducto del enriquecimiento de uranio. A diferencia del uranio natural, es menos radiactivo. Puede considerarse desecho de baja radiactividad o aprovechado para fabricar combustible MOX.

El uranio empobrecido, con menos de un 0,7% de U 235, deriva del enriquecimiento de uranio y no es tan radioactivo como el uranio natural. Sirve como residuo de baja actividad o puede ser utilizado para crear combustible MOX.

Con una proporción de U 235 inferior al 0,7%, el uranio empobrecido se forma durante el proceso de enriquecimiento y es menos radiactivo que el uranio natural. Puede ser descartado como residuo de baja actividad o aprovechado para producir combustible MOX.

Estamos en contacto con uranio en nuestra rutina diaria

La radiación es un elemento común en nuestro día a día. A menudo, consumimos o respiramos pequeñas cantidades de uranio, que se encuentra de forma natural en nuestro entorno. (Infografía: A. Vargas/OIEA)

Normalmente, nuestra exposición a la radiación es de 1 µSv al año por la ingesta o inhalación de uranio, pero un viaje en avión de Lima a Madrid nos expone a una dosis de radiación cósmica de 58,8 µSv. Además, cada año ingerimos o inhalamos productos derivados de la desintegración del uranio, lo que supone una exposición anual de 120 µSv.

Es importante tener en cuenta que la ingestión o inhalación de grandes cantidades de uranio puede resultar dañina. Aquellas personas que trabajan en la prospección, extracción o procesamiento de este material deben seguir estrictas normas y procedimientos, como el uso de indumentaria y equipos de protección, para evitar cualquier problema de salud.

Características físicoquímicas del uranio

El uranio se encuentra en la tabla periódica dentro del grupo de los actínidos, con el símbolo U y un número atómico de 92. Con sus 92 protones, es el elemento con mayor peso atómico presente en la naturaleza.

Este metal tiene un color gris, aunque suele encontrarse en forma de compuestos químicos en la naturaleza. Al ser un metal, presenta alta ductilidad y maleabilidad, pero no es un buen conductor de electricidad.

Sin embargo, la característica más destacada del uranio es su radioactividad. Los elementos radiactivos son aquellos cuyo núcleo es inestable y se desintegran fácilmente, emitiedo energía en el proceso. De esta manera, buscan un estado estable del núcleo, transformándose en otros elementos más estables.

Los secretos ocultos del uranio que desconocías

Conoce algunas curiosidades sobre el uranio

Desde la antigüedad, el óxido de uranio ha sido utilizado en diferentes aplicaciones, mucho antes de que se supiera qué era el uranio o incluso antes de que se conociera la existencia de los elementos químicos.

En realidad, se han encontrado vidrios del año 79 a.C. que han sido teñidos con este material y presentan una interesante tonalidad amarillenta verdosa que resplandece bajo la luz ultravioleta.

A pesar de su atractivo aspecto, en la actualidad este tipo de vidrio solo se utiliza con fines ornamentales. Aunque su composición solo contiene un 2 % de uranio y este se encuentra atrapado en la estructura vítrea, no es recomendable su uso para almacenar comida o bebida.

Ramificaciones del Uranio en la salud humana

Impacto del uranio en nuestro día a día:

En nuestro entorno cotidiano, estamos continuamente en contacto con el uranio a través de la comida, el aire, el suelo y el agua. De hecho, es una presencia natural en estos recursos.

La comida y el agua como fuentes de uranio:

Los alimentos como los vegetales y el marisco, así como el agua que bebemos, aportan pequeñas cantidades de uranio. Incluso al respirar, inhalamos cantidades mínimas de este elemento presente en el aire.

Zonas con mayor exposición al uranio:

Existen ciertas situaciones en las que la exposición al uranio puede ser más elevada en comparación con una persona común. Por ejemplo, aquellos que viven cerca de vertederos de sustancias peligrosas o minas, trabajan en la industria del fosfato, consumen alimentos cultivados en suelo contaminado o beben agua de una zona donde se vierte uranio.

Precaución con el vidrio de uranio:

Aunque los vidrios de uranio están prohibidos, algunos pueden tener en su hogar piezas antiguas con esta sustancia. Por ello, es importante ser consciente y tomar medidas adecuadas para evitar una posible exposición a través del contacto con estos objetos.