Las mejores herramientas de corte para tu fresadora todo lo que debes saber

El avance de la tecnología en la creación de instrumentos ha ampliado las opciones de fresado y ha mejorado notablemente la eficiencia, el nivel de excelencia y la precisión de las tareas ejecutadas.

Brocas con vástago de carburo de tungsteno para cortar fresas

Fresas de vástago para mecanizado de metales: opciones en materiales de corteTipos de materiales

Existen diferentes tipos de materiales para la fabricación de fresas de vástago utilizadas en el mecanizado de metales, entre los que se destacan el acero rápido (HSS) y el metal duro integral (VHM).

Fresas universales y de alto rendimiento en máquinas CNC

En la actualidad, las máquinas CNC modernas emplean principalmente fresas universales y de alto rendimiento de metal duro integral, especialmente adecuadas para la producción en serie. Gracias a su alta velocidad de mecanizado, estas fresas son muy potentes y ofrecen una larga vida útil, así como una gran profundidad y anchura de corte. Son una opción muy rentable en general.

Desventajas de las fresas de metal duro

Aunque las fresas de metal duro macizo tienen importantes ventajas en el mecanizado de metales, como las mencionadas anteriormente, también presentan algunas desventajas, como por ejemplo un costo más elevado en comparación con otros tipos de fresas.

Fresas de vástago con ranuras en espiral

La mayoría de las fresas de vástago utilizadas en el mecanizado de metales tienen las ranuras dispuestas en forma de espiral. Esta disposición presenta diversas ventajas, como un corte uniforme, una fuerza de corte uniforme y un funcionamiento suave de la máquina. Además, gracias a esto, las virutas se eliminan lateralmente, evitando que se introduzcan en el orificio.

Fresa de vástago de 2 mm

En particular, Gühring ofrece fresas de vástago de metal duro integral de cuatro filos con un diámetro nominal de 2 mm. Además, estas fresas pueden ser recubiertas con diferentes materiales. También se encuentran disponibles microfresas en tamaños que van desde 0,3 a 3,2 mm.

Fresa de desbaste

En el fresado de desbaste, se suelen emplear fresas con perfil de desbaste, las cuales se caracterizan por su amplia anchura y profundidad de corte. Esto permite eliminar una gran cantidad de material en un corto periodo de tiempo. No obstante, debido a esta técnica agresiva, la superficie resultante suele presentar rugosidades y marcas de mecanizado.

Con el fin de conseguir un acabado más refinado y una mayor precisión dimensional y de forma, suele realizarse un mecanizado fino posterior al desbaste. En esta etapa, se retiran pequeñas cantidades de material, generalmente solo unas centésimas de milímetro. La fresa de acabado utilizada en este proceso produce virutas de mayor tamaño, que deben ser eliminadas mediante aire comprimido o líquido refrigerante.

Además, es importante tener en cuenta que una fresa con perfil de desbaste genera menos fuerzas de corte que una fresa de acabado de corte liso, lo que supone una ventaja en términos de estabilidad y precisión en el mecanizado.

Si desea obtener más información sobre nuestras fresas de desbaste, le invitamos a visitar nuestra página web www.fresasdedesbaste.com

En el mecanizado de metales, las fresas de desbaste están sujetas a altas cargas mecánicas. Por ello, es fundamental utilizar materiales de corte de alta calidad, que sean altamente resistentes y no se vean afectados por los cambios drásticos de temperatura.

Variedades de herramientas para máquinas fresadoras

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Fresadoras y sus herramientas

Una fresadora está compuesta por distintos componentes que son esenciales para su función de moldear materiales, destacando las cuchillas o "fresas" utilizadas para cortar el acero y obtener el resultado final.

A la hora de elegir las herramientas adecuadas para una fresadora, es importante tener en cuenta el material a cortar, ya que cada tipo de material requiere herramientas específicas debido a su dureza o fragilidad. Podemos diferenciar entre dos modelos:

Cuchillas para materiales duros: ideales para cortar aceros más resistentes y compactos.
Cuchillas para materiales blandos: diseñadas para trabajar con materiales menos duros y más blandos.

Además, también hay que considerar el tipo de trabajo que se va a realizar, ya que existen diferentes modelos de herramientas para fresadora en el mercado:

Fresas cilíndricas: se utilizan principalmente para fresar superficies planas y crear ranuras.
Fresas de perfil: ideales para dar forma a superficies con curvas y ángulos.
Fresas de punta esférica: perfectas para hacer cavidades o rebajes en materiales blandos.
Fresas de plaquitas: recomendadas para cortar materiales de alta dureza y realizar trabajos de gran precisión.
Fresas de dentado: utilizadas para fresar dientes y engranajes en materiales como el acero o el bronce.

Cabezales de fresado

Un cabezal de fresado es una herramienta utilizada en el mecanizado de metales, en la que se colocan placas intercambiables. Estos cabezales constan de una herramienta básica con una interfaz de máquina y un soporte de filo de corte.

En el proceso de fresado, los cabezales se utilizan principalmente para fresado frontal, con un rango de entre 4 y 50 filos. En el caso de los modelos más antiguos, los filos de corte suelen ser de metal duro, mientras que las placas intercambiables modernas suelen ser de la misma clase de material. Sin embargo, Gühring también ofrece fresas con filos de PCD que permiten un fresado frontal aún más eficiente.

En la zona de los cabezales de fresado, se pueden encontrar diferentes formas constructivas. Por ejemplo, el cabezal de fresado frontal tiene un ángulo de ajuste de 45° a 90° y se utiliza para el mecanizado de superficies. Por otro lado, el cabezal de fresado angular tiene un ángulo de ajuste de 90° y se emplea también en el fresado frontal. Además, existen cabezales de fresado de formas, que utilizan placas de corte redondas para permitir el fresado de forma libre o de copia.

Otra variante son las fresas de erizo, que son adecuadas para el fresado con profundidades de corte extremadamente altas, por lo que sus placas intercambiables son especialmente resistentes.

El proceso de fresado y sus aplicaciones en palabras

El fresado es un proceso fundamental en la creación de piezas e instrumentos industriales mediante un sistema de corte por coordenadas. A través de equipos especializados, se realizan movimientos e incisiones para obtener el producto final.

Este servicio se ha destacado por su innovación en diversos sectores, cada vez más interesados en automatizar la fabricación de herramientas y aparatos. En Inoxform, ofrecemos fresado de alta calidad para la industria automotriz.

Para llevar a cabo este proceso, es imprescindible contar con fresadoras que cuenten con las funcionalidades necesarias para cada proyecto. ¿Quieres conocer cómo trabajamos y los tipos de fresadoras que utilizamos? ¡Sigue leyendo!

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Conceptos básicos de fresado

Fresado: una técnica de producción que se realiza mediante el corte con herramientas con filos geométricos, de forma intermitente. Su objetivo principal es la fabricación de piezas con formas específicas.

Las herramientas de fresado cuentan con uno o varios filos de corte y permiten el mecanizado de materiales en diferentes direcciones, como vertical, horizontal y oblicua, en relación con el eje de rotación.

Una fresa es capaz de eliminar material de una pieza en bruto de forma continua, en forma de virutas. A diferencia de una broca, que solo corta con su punta, la fresa corta por el perímetro, el filo principal, el filo secundario y la frente. Esto permite mecanizar materiales en varias direcciones simultáneamente, también conocidas como ejes. Durante la extracción de virutas, las herramientas giran a gran velocidad sobre su propio eje y se mueven al mismo tiempo siguiendo el contorno de la pieza a producir. Así, la forma de la pieza final se determina por el ancho de aproximación y la herramienta utilizada.

Por otro lado, las ranuras se emplean para crear hendiduras alargadas en las piezas. Pueden cortar completamente el material, creando agujeros oblongos, o solo parcialmente, como en el caso de los chaveteros. Este tipo de fresado es muy exigente, ya que las herramientas se encuentran rodeadas completamente por el material, a 180 grados.